Existe un problema muy común en casi todas las empresa. ¿Sabes cuál es?
– ¡Efectivamente!. La gente tiene más ganas de estar de vacaciones que de trabajar. Yo también. Y seguro que a ti te pasa lo mismo.
Pero de eso no estoy hablando. Hablo de una más común aún que aparece como consecuencia de las largas horas que pasamos sentados, las malas posturas que adoptamos, la baja preparación física que tenemos, el estrés diario, el como manipulamos ciertas cargas, como hacemos ciertos gestos, el tiempo que permanecemos de pié sin movernos y ese largo etcétera de causas que desencadenan molestias físicas afectando a la salud y al rendimiento de los equipos de trabajo.
Ahora ya sabes cuál es el factor común, ¿verdad?. ¡Eso es!. Las dolencias de espalda. ¡Maldito dolor de espalda!.
La solución para esto suele ser sencilla y compleja a la vez. Sencilla porque soluciones haberlas, haylas. Complejas porque (es curioso) siempre hay a lgo más importante, algo más urgente que atender. En fin…
A lo que voy hoy.
Quiero darle valor a todos los beneficios que rodea la puesta en marcha de las formaciones que ayudan a solucionar el problema del dolor de espalda, las formaciones de escuela de espalda laboral. Y quiero hacerlo empaquetando esos beneficios en dos grupos: el lógico y el menos lógico.
El primero. Los más lógicos, los beneficios que todos podemos llegar a entender de manera rápida:
*Beneficios tangibles. El impacto medible de la acción en la empresa. Todo lo que hacemos y que se puede medir para saber si la formación está siendo útil. Como por ejemplo, menores bajas laborales relacionadas con el dolor de espalda o el estrés y todo lo que esto conlleva.
*Productividad del equipo. Existe una relación muy directa con el dolor y el rendimiento. Al aliviar las dolencias, las personas están más centradas en el trabajo y eso repercute en resultados positivos. Más productividad. Ya sabes, ¿cómo rindes los dias que te duele algo?. Pues eso.
*Menor estrés. A la par del punto anterior. En este tipo de formaciones se aborda el control del estrés. ¿Por qué?. Básicamente porque uno de los efectos secundarios del estrés deriva en aumento de la tensión muscular. Si conseguimos reducir el estrés, las dolencias musculares también serán (previsiblemente) menores. Se suele aprender técnicas relajación mental y estiramientos físicos que ayudan a reducir el estrés.
*Fomento cultura preventiva. Uno de los puntos más importantes para aprender a manejar el dolor de espalda y el estrés es conocer y conocerse. Esto es vital para la prevención. En este tipo de fornaciónes se enseña a las perslmnas a reconocer y aboradr los signos tempranos de molestias en la espalda con la idea de prevenir problemas mayores y promover una mejor salud a largo plazo.
Imagino que hasta aquí estaremos de acuerdo. Estos son cuatro de los beneficos más visibles, más lógicos. Hay más. Claro que si. Seguro.
Ahora quiero centrarme en los del segundo grupo.
El segundo. Los otros que aportan valor añadido a las formaciones que ayudan a mejorar el manejo del problema del dolor de espalda. Los que valoramos menos y que aportan tanto valor. Los que somos capaces de ver, de sentir, de percibir cuando evaluamos el resultado de la puesta en marcha de la escuela de espalda en la empresa. Hablo de:
*Mejora de clima laboral. La ausencia de dolor genera bienestar. Genera buen rollo. Nos hace sentirnos mejor. Y todo eso infliye de manera directa e indirecta en la empresa. El ambiente es más positivo y las personas se sienten más comodas, más satisfechas. Más mejor. Más wellbeing.
*Retención del talento. Cuando sientes que alguien se preocupa por ti, ¿cómo te sientes?. Pues eso. La puesta en marcha de este tipo de formaciones en las empresas generar esa misma sensación. El compromiso con el bienestar se traduce en aumento en la retención del talento. Las personas se sienten valorados. Generar la sensación de protección, que la empresa se preocupa por la salud y la comodidad de sus trabajadores es muy positivo.
Y por qué te cuento todo esto.
A la hora de poner en marcha este tipo de formaciones, tenemos que tener una visión amplia de todos los beneficios que genera de manera global. Los directos: reducir el dolr. Los indirectos, todo ese malor añadido que aporta la escuela de espalda en las empresas.
Y lo sé porque este resultado lo he visto muchas veces. Ya son muchas formaciones las impartidas, muchas charlas mantenidas con los trabajadores, con los mandos intermedios, con los puestos directivos, con los comites de diereción,… que valoran los beneficos globales de la puesta en marcha de la acción.
La respuesta a la pregunta que te ronda ahora en la cabeza: ¿cómo puedo poner en marcha esto en mi empresa?.
Te lo respondo aquí: Escuela de espalda para las empresas.
Échale un ojo y después hablamos.
¿Cómo?.
>> Por email: [email protected]
>> Por teléfono: +34 613 018 747
As you want!
P.d. Si quieres curiosear más sobre cómo son nuestras formaciones de dolor de espalda desde dentro, aquí.
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